El almohadón de plumas....

Omar Alejandro Andrade Herrera

Al otro día Alicia seguía peor. Hubo consulta. Constatóse una anemia de marcha agudísima, completamente inexplicable. Alicia no tuvo más desmayos, pero se iba visiblemente a la muerte. Todo el día el dormitorio estaba con las luces prendidas y en pleno silencio. Pasábanse horas sin oír el menor ruido. Alicia dormitaba. Jordán vivía casi en la sala, también con toda la luz encendida. Paseábase sin cesar de un extremo a otro, con incansable obstinación. La alfombra ahogaba sus pesos. A ratos entraba en el dormitorio y proseguía su mudo vaivén a lo largo de la cama, mirando a su mujer cada vez que caminaba en su dirección.
Alicia seguía empeorando con los días, ningún médico sabía la causa de su malestar, todos los médicos daban diagnósticos diferentes a lo mencionado por los doctores anteriores. Mientras que Jordán se desplazaba de un lugar a otro pensando en las múltiples enfermedades que podría tener su amada. A caso existiría algún método para encontrar cual es la falla que tiene su mujer dentro de su organismo. El clima y el lugar donde se encontraba Alicia era adecuados para poder tener una vida saludable y el goza miento de ella. Muchos vecinos eran de la tercera edad, y justamente vivían ahí por lo agradable que era el clima.
Jordán se la pasaba en la sala para estar siempre al pendiente de su amada de todo lo que llegase a necesitar ya la sala era muy incómoda, pues después de estar ahí tanto tiempo, la columna ya no aguantaba la postura incómoda que tomaba al estar en el sillón.
Mientras que Jordán se encontraba ahogado en sus profundos sentimientos por su amada, Alicia trataba de no mostrar todo su sufrimiento, pues quería mucho a Jordán, y con tan solo verlo triste, ella se sentía mas débil para continuar luchando por su vida.
En los días siguientes Alicia iba decayendo más y más, hasta la llegada de su muerte, fue muy doloroso para su esposo, ya que nunca habían tenido hijos y ahora él se había quedado solo. Ya que sus padres había muerte cuando el era pequeño, y lo único que le quedaba como familia era su grande y amada esposa Alicia.