Foto grupal 651

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jueves, 25 de febrero de 2010

Ciudad del deseo


→ Arévalo Pacheco Rafael
Algunas tuve un sueño laberintico donde vivía en una ciudad diferente, era una ciudad muy diferente a lo que había imaginado. El sueño estaba lleno de espejos y de cosas que en la realidad no existen. Yo soy un simple estudiante de la UNAM, vivo en una ciudad llena de problemas, hay problema con el agua y con la economía. Afortunadamente mi ciudad esta cambiando es la ciudad mas liberal del país, pero la mas conservadora si la comparamos con las ciudades de Europa.
Lo que soñé era otra cosa una ciudad llena de libertades, yo estaba justamente afuera de ella, cuando entre el letrero decía, Bienvenidos a la Ciudad del Deseo. Donde todo lo que imagines se hace realidad. Al leer esto sentí una emoción muy fuerte como nunca lo había sentido. La ciudad al entrar la gente vivía sin preocupaciones, eran personas muy diferentes, alegres, echando relajo, donde querían, era algo diferente. Físicamente eran iguales a los humanos normales de mi ciudad, la diferencia era que aquí las personas tenían otras formas de pensar.
Cuando caminaba por las calles, veía tiendas, oficinas, bares, escuelas, etc. Me dije esto es lo mismo que hay donde yo vivo, pero no era cierto, en las calles la gente podía cerveza o bebidas alcohólicas en una tienda común y corriente, era como si fueras a comprar refresco. Y lo mas impresionante era que se lo tomaban en las calles y la gente que no tomaba no les decía, nada. Después de ver esto fui a una tienda, para probar una cerveza, me quede viendo la tienda, había cosas normales, como pan, papas, cremas, etc. Pero algo difería de esto, había un polvo blanco, arriba decía “5 gramos $50” le pregunte al tendedero que, que era y me dijo: “parece que no eres de aquí” se llama cocaína, me quede impresionado y le dije que no hace daño esto, y me dijo que era una droga dañina como lo es el tabaco y el alcohol, pero no solo vendía coca, también marihuana, tachas en cajitas especiales como si fueran chicles, heroína, o sea todas las drogas que te puedes imaginar.
Era una ciudad muy diferente, con libertad la gente podía decidir si quería dañarse con esas porquerías, y no les decían nada. Salí de la tienda, tomando mi cerveza camine por las calles, y justamente en una esquina había una mujer sin sostén, claro hacia calor, los hombres ni la volteaban a ver la respetaban.
No era la única mujer, asi había mas muchas mas. Después de ver esto vi a mas mujeres en una esquina y carros con un hombre le decía que cuanto estaban y le dijeron que $200, fui a ver y le dijo la chava que no ves que ya subieron los precios de la prostitución, el gobierno lo estableció. Le pregunte a una chava, que si esto no era prohibido me dijo que no que la gente respeta cualquier tipo de trabajo, el sexo es uno de ellos y ofrecemos lo que algunas mujeres no pueden, placer. Además me dijo que el gobierno siempre controla los precios, y si quieres trabajar en esto tienes que ir a una dependencia del gobierno y te dan una credencial y el lugar, y tu horario. Me fui, en cada esquina había casetas con dulces y condones. Al parecer aquí también hay enfermedades, pero no era cierto la gente estaba vacunada con cada enfermedad, ya sea sida o gripe.
Todo esto que estaba viendo era a plena luz del día, había empleos por donde quisieras, y al parecer pagaban muy bien, había muchos niños jugando, las escuelas estaban muy bien cuidadas.
Todo era diversión en esta ciudad, las relaciones eran diferentes, iglesias nunca vi una, el matrimonio no existía, podías estar con una mujer el tiempo que quisieras tener hijos y si ya no la amabas separarte de ella. La violencia no existía, para que robar si en un trabajo ganas bien. Y el que llegara a robar, secuestrar o violar a alguien lo mataban. Era una ciudad donde toda la gente deseaba vivir, la forma de vivir era muy buena, sin peligros , ni nada. Lo que creías prohíbo aquí era legal y común, en las noches en los parques la gente podía tener sexo y las personas simplemente se retiraban. Había diversión de cualquier índole, videojuegos, cine, sexo, todo había aquí. Desperté de mi sueño, y volví a la misma ciudad aburrida y con problemas, quiero volver a regresar a la Ciudad del Deseo.

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